Nació el 18 de septiembre de 1925 en San Antonio de Areco, de una familia descendiente de irlandeses, hija de Miguel y Elena que eran trabajadores del campo. Se crió en un ambiente rural y estudió hasta el cuarto año del Bachillerato Nacional. Según su propia narración, le envió cartas a Eva Perón para pedirle trabajo, obtuvo una reunión en la Fundación Eva Perón, “y me dieron para hacer política” y a partir de entonces fue la subdelegada en Areco, en reemplazo de Margarita Willington de O’Berty. Antes había pasado muy poco tiempo trabajando en el empadronamiento femenino. Como subdelegada estuvo a cargo de la unidad básica de Areco hasta convertirse en legisladora, impulsando el empadronamiento y la convocatoria a las mujeres de esa localidad a participar en política. Participó activamente de la campaña electoral de 1951, dando discursos en público. Mientras cumplía esta función, Egan trataba directamente con Atilio Renzi, una de las personas más cercanas a Eva. Décadas más tarde, contó que “la señora”, como le seguía diciendo a Eva, se encargó de darle movilidad: recorría el territorio mayoritariamente rural con un vehículo Land Rover que le había dado el propio Renzi, manejado por ella misma. Era una persona conocida en ese medio y eso le facilitaba mucho la tarea: contaba que los dueños de campos y los estancieros “me conocían, porque mi papá tenía una tropilla y mis tías eran maestras y otra, directora de escuela”. Entonces, cuando pedía permiso para entrar, ellos se lo permitían, y una vez adentro hablaba con las mujeres de los peones. Fue por su trabajo como subdelegada que fue electa como candidata. Siendo muy joven, con 26 años, fue electa diputada provincial para el período 1952-1955. En la Legislatura fue secretaria en la comisión Segunda de Legislación. Después de ser legisladora había entrado a trabajar al Ministerio de Salud, cargo del que la dejaron cesante a partir del golpe de 1955 “por razones políticas”. Como parte de la persecución, estuvo presa. En 1974 escribió al mismo ministerio solicitando su reincorporación. Después de haber estado presa, nunca más se dedicó a la política, aunque sí, mucho tiempo más tarde, brindó discursos públicos y dio su testimonio en algunas entrevistas sobre su experiencia política. El 8 de marzo de 2019 la Cámara de Diputados de la Provincia de Buenos Aires le rindió un homenaje.