Durante el encuentro, en el que participaron trabajadores de la Cámara, se reflexionó sobre qué tipos de masculinidades existen, para poder construir  nuevas formas de relacionarse, reducir las brechas y lograr mayor igualdad social. 

Matías Rivero destacó que “tenemos el compromiso de pensar qué hacemos para  colaborar en este cambio cultural, no somos culpables de tener actitudes patriarcales, porque es la sociedad que siempre existió, pero sí tenemos la responsabilidad de trabajar para revertirlo, y éste es el camino, que estemos todos acá voluntariamente”.

Por su parte Mariela Breard destacó: “Tenemos el compromiso asumido de propiciar espacios libres de violencia, plurales, respetuosos de las diversidades y exentos de toda discriminación, trabajamos para lograrlo”. Y agregó que “estas capacitaciones ayudan a garantizar que haya más igualdad de derechos humanos”. 

Además, Micaela Ceretti explicó: “La capacitación apunta a sensibilizar sobre actitudes, saberes, valores y prácticas que prevengan y erradiquen la violencia por motivos de género y lograr eliminar la violencia micromachista, donde pesa el dominio masculino en lo cotidiano”.  

Finalmente Pam Dilda aseguró que “el sostener la masculinidad homogénea tiene un alto costo, porque implica imponerse, ser el primero y el mejor para no ser discriminado, o dejar de pertenecer, y esto ha cambiado mucho y aún hay mucho más por hacer desde el lugar de cada uno, por eso estamos acá, colaborando y aprendiendo a construir una nueva sociedad”.